¡Oh gran rey, gran elefante!,
tú expresas esa elegancia
que una monarquía rancia,
folklórica y mendicante
jamás tendrá... ¡Qué talante
refinado hay en tu porte,
tú que al cielo y tu consorte
acaricias con tu trompa,
por más que al rey de la pompa
tu existencia no le importe!
Jesús María Bustelo Acevedo
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario